
Con furia desenfrenada
se va tragando el instante
el reloj que nunca para
ni se conforma con nada.
Sediento anda de muerte,
ansioso de nueva vida,
indiferente en el alba,
tardo a la anochecida.
Yo intento asirme al momento
desgranando entre mis dedos
los gozos y los consuelos
de los días llevaderos.
¡Muy bueno Lucrecia!!, me ha encantado. Un abrazo.
ResponderEliminarMuy bien Lucrecia, has vuelto al clásico con estilo, sólo una cosa, en el verso de remolón, por esa palabra te suman 9 sílabas, si lo cambias por gandul o tardo, tendrás ocho. buen trabajo.
ResponderEliminarGracias, Fernando, cambiado está.
ResponderEliminarQué chulo, a mí las rimas como que no me salen. Tic-tac, miro mi reloj, parece que me sonríe...
ResponderEliminarYo intento asirme al momento, qué buena frase.
ResponderEliminar