viernes, 30 de diciembre de 2011

Un espléndido sueño




El mar brota inmenso,
la mañana se engalana de azul,
un viento suave nos besa la piel.

Yo sería una madre
y tú mi niño
vestido de manzana.

Avanzamos remando hacia la isla fugitiva,
de arenas blancas,
tesoros de caracolas nos aguardan.

La paciencia instintiva y pétrea
rema y rema
ante el lazo umbilical de tu mirada.

Una ola inesperada
te arranca de mi paisaje
yo, serena, me lanzo de cabeza al agua.

Aguas cristalinas
acompañan mi vuelo
a los secretos turquesas de su fondo.

Allí estás tú,
te aferras a mis brazos
y salimos impulsados por la fuerza
de nuestros corazones.

De nuevo en la barca,
me despierto
con el sabor de la sal en mis labios.

Venturosa noche
en que soñé
el orgullo de alumbrar
tu ser de nuevo.

6 comentarios:

  1. Lucrecia, este poema es hermoso, pero la foto que lo ilustra es amor de madre, que en estas fechas coge el álbum y revive momentos entrañables(espero no haberme equivocado). Un beso.

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  2. El "pero" Lucrecia, se quería referir a que todavía es más hermoso con la ternura de esa foto. A veces nos expresamos un poco mal y aparecen los équivocos, mis disculpas.

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  3. ¡Cuánto amor y sensibilidad hay en este bellísimo poema!
    Creo que me estoy haciéndo cada vez más fan de la poesía.

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